Policía de Casilda denunciada por hacer informes criminalísticos a “gusto del consumidor”
Dentro de un Legajo de la Fiscalía de Casilda, la Defensa Pública se encontró con una sorpresa: dos informes criminalísticos que coincidían en su objeto, número de identificación y fecha, pero que arribaban a conclusiones diferentes. En efecto, una integrante de la Policía Científica de la Unidad Regional IV hizo un cotejo de huellas de cubierta de bicicleta y calzado y, mientras en un informe concluyó que no había semejanzas entre ambas huellas, en el restante concluyó exactamente lo contrario. Dado que el informe de científico no tenía nada y mas bien parecía enderezado a que la Fiscalía pudiese utilizar cualquiera de los dos, la Defensoría Regional de Rosario presentó una denuncia ante la Fiscalía Regional de Rosario exigiendo una investigación penal sobre los hechos que no se encuentre en cabeza de la Fiscalía de Casilda e hizo lo propio ante la Unidad Especial de Asuntos Internos de la Policía de la Provincia de Santa Fe.
La denuncia fue presentada el día jueves 30 de marzo firmada por el Defensor Regional de Rosario, Dr. Gustavo Franceschetti y la asistente de la Oficina de apoyo a defendidos víctimas de violencia institucional, Dra. Analía Abreu.
Dicha denuncia fue elaborada a partir de los hechos informados por la Defensora Pública de Casilda, Dra. Evangelina Bonacalza, quien el día 20 de marzo de este año puso en conocimiento de la Defensoría Regional, el hecho protagonizado por personal policial de dicho Distrito Judicial, relacionándolo con otro sucedido el 25 de octubre de 2016 en el que durante una rueda de reconocimiento de objetos. Allí, el Jefe de la Policía de Investigación manifestó a viva voz “hay hoja A4” o “poné hoja A4” -tal como surge en el registro de audio de dicha audiencia-. Luego de esta expresión, la testigo del hecho solicitó que sea rotada el arma N° 4, a la que finalmente señaló como el objeto que se utilizó para la concreción de un supuesto hecho delictivo.
Los miembros de la Defensa Pública solicitaron que las investigaciones de estos hechos no sean asignadas a otra Unidad Fiscal del Distrito Judicial Casilda, sino que la misma sea derivada a la Unidad Fiscal de Corrupción y Violencia Institucional de Rosario. Este pedido es realizado “en pos de ejecutar una genuina persecución penal de estos hechos denunciados, evitar riesgos que puedan afectar a la eficacia de la investigación y por los intereses que se hallan comprometidos, como la garantía de acceso de toda persona sometida a persecución penal a una defensa técnica de calidad”. Al mismo tiempo requirieron al Ministerio Público de la Acusación que investigue los hechos que puedan constituir delito por parte de los dos funcionarios policiales y que los dos sean citados a declarar en sede de la Fiscalía.
La Oficina de Apoyo a Defendidos víctimas de Violencia Institucional fue creada dentro de la estructura orgánica de la Defensoría Regional de la 2da. Circunscripción Judicial (Rosario). Tiene como misión combatir las actividades ilícitas cometidas por personal policial. El hecho de distorsionar o infringir las leyes o normas por parte de personal encargado de la investigación afecta en última instancia, no sólo al proceso judicial -como es el caso- sino también a la institución encargada de aplicar la ley en su totalidad.