Con la participación de la Defensora Provincial, se firmó el acta de traspaso del Centro de Justicia Penal
En el día de hoy, lunes 3 de julio, el Gobierno de la Provincia de Santa Fe hizo entrega del Centro de Justicia Penal de la ciudad de Rosario a la Corte Suprema de Justicia provincial.
El acto se desarrolló en las instalaciones del Centro de Justicia Penal y estuvo presidido por el Gobernador de la Provincia de Santa Fe, Ing. Miguel Lifschitz, quien firmó el acta de traslado junto con el Presidente de la Corte Suprema de Justicia provincial, Dr. Daniel Erbetta. Además, participaron del mismo la Defensora Provincial, Dra. Jaquelina Ana Balangione; el Fiscal General, Dr. Jorge Baclini; el Presidente de la Cámara de Diputados de la Provincia de Santa Fe y ex Gobernador, Dr. Antonio Bonfatti; y el Ministro de Justicia y Derechos Humanos de la Provincia de Santa Fe, Dr. Ricardo Silberstein.
En tanto, asistieron a la ceremonia: el Defensor Regional de la 2°Circunscripción Judicial, Dr. Gustavo Franceschetti; Defensores Públicos de Rosario; los Ministros de la Corte Suprema de Justicia de la Provincia de Santa Fe, Dra. María Angélica Gastaldi y Dres. Rafael Gutiérrez, Ricardo Spuler, Roberto Falistocco y Mario Netri; la intendenta de Rosario, Mónica Fein; el ex Gobernador de la Provincia de Santa Fe y actual Diputado Nacional, Dr. Hermes Binner; el Fiscal Regional de la 2° Circunscripción Judicial, Dr. Patricio Serjal; Jueces de 1° y 2° Instancia de Rosario; Diputados provinciales; Fiscales de Rosario; autoridades del Poder Ejecutivo provincial y municipal; entre otros.
El acta de entrega del Centro de Justicia Penal se realizó tras haber concluido las obras edilicias y de infraestructura y luego de la firma del convenio suscripto entre el Gobierno provincial y la Corte Suprema de Justicia que contó con la participación del Servicio Público Provincial de Defensa Penal y el Ministerio Público de la Acusación.
El edificio que se encuentra ubicado en la manzana delimitada por calles Virasoro, Sarmiento, Rueda y Mitre simboliza los principios del nuevo sistema procesal penal que la Provincia de Santa Fe puso en marcha el 10 de febrero de 2014 en cuanto a modernidad y transparencia. Las instalaciones se adaptan al modelo acusatorio, basado en audiciones orales y públicas y que implició el compromiso de todos los poderes del Estado durante varios años en la construcción de una justicia con la capacidad de respuesta más accesible y humana.
La Defensora Provincial señaló que el traspaso del Centro de Justicia Penal hacia la órbita del Poder Judicial “es un salto cualitativo impresionante”. Del mismo modo expresó que “quienes estamos en esta parte del fuero penal y vimos estos cambios estamos felices y comprometidos en seguir adelante con estos pudiendo palpar el beneficio y plus de calidad que tiene este sistema por sobre el otro”.
Balangione destacó que el Centro de Justicia Penal “tiene una simbología vinculada con la transparencia y la esencia del sistema”. También manifestó que permite, desde lo simbólico, “un trabajo en igualdad de armas con la Fiscalía Regional”. Además hizo hincapié en sus implicaciones para el trabajo día a día de la Defensa Pública, mejorando el acceso a la información y a los datos, el encuentro codo a codo con los efectores y los jueces, y la posibilidad de contar con salas de audiencia bien diseñadas. Para finalizar, dijo que “con la ley de Juicio por Jurados podría darse por completado el círculo del sistema penal democratizado”.
También destacó que el traslado de la Defensoría “habilitará el acceso al sistema informático, que permitirá trabajar de una manera más integral entre la parte jurisdiccional y el Ministerio Público de la Acusación”. Asimismo señaló que en Rosario está el grupo más grande de integrantes del SPPDP, quienes trabajan en un edificio que no cuenta con las proporciones edilicias y de infraestructura necesarias pero que “sin embargo desarrollan sus tareas de manera óptima y con mucho esfuerzo”.
De esta manera indicó que la Regional Rosario “ha tenido logros importantísimos que son señeros en lo que es la política y la gestión de la Defensa a lo largo de todo el territorio”, haciendo referencia a los traslados de presos en comisarías hacia Unidades Penitenciarias como parte de una gestión que continúa con el Ministerio de Seguridad “para que se ajuste a las necesidades de la dignidad humana y a lo que marcan las convenciones que campean esta materia”.
Durante el acto, el Gobernador de la Provincia de Santa Fe, indicó que la transformación de la justicia penal en el territorio provincial fue un “trabajo colectivo sin precedentes tanto en Santa Fe como en el país” enumerando los logros a partir de la implementación del nuevo código procesal penal, la creación de las nuevas estructuras del SPPDP, MPA y las Oficinas de Gestión Judicial, entre otros. Por ello, expresó que debe valorarse “enormemente ese capital institucional que tiene la Provincia de Santa Fe” dando los mejores augurios para quienes ocuparán dicho espacio con el objetivo de realizar de forma óptima su tarea profesional.
Por su lado, Daniel Erbetta agradeció a todos los actores de los tres poderes del Estado que permitieron poner en marcha este sistema de reforma al proceso penal que tuvo un “impacto organizacional tan trascendental que ya se han podido alcanzar muchos de los objetivos institucionales propuestos”. Por ello manifestó que dicha reforma “debe cuidarse y protegerse comprometiendo el esfuerzo de todos para consolidarla”.
Sobre el nuevo edificio, el Presidente de la Corte Suprema de Justicia provincial dijo que “proyecta en lo arquitectónico mucho de los valores de un sistema adversarial y acusatorio” agregando que se trata de un “símbolo trascendente y de vanguardia en el territorio argentino” ya que es parte de “la política de los consensos, que privilegia los grandes temas en aras de la necesidad de la gente y, es una evidencia de cuánto puede hacerse y avanzar cuando en el marco de un estricto respeto a la división de poderes se privilegia e incentiva el diálogo interinstitucional de gestión entre los poderes del Estado”.
Por último, para Silberstein el Centro de Justicia Penal contempla “los valores en la fuerza de las políticas de Estado”. Para él, esta obra “es mucho más que un edificio” porque lo que ha sido construído “es una puerta al Poder Judicial del siglo XXI”.