El Servicio Público Provincial de Defensa Penal -SPPDP- realizó una serie de acciones en favor de los internos e internas que se encuentran alojados en las Unidades Penitenciarias Nº 3 y en la nueva Alcaidía Regional de la ciudad de Rosario. 

Inspección a la U3

Por un lado, el día viernes funcionarios del Registro Provincial de Casos de Violencia Institucional y afectaciones de Derechos Humanos perteneciente a la Defensoría Provincial, visitaron la Unidad Penitenciaria Nº 3 a fin de relevar el estado en el que viven los internos allí alojados. 

Durante la inspección a aquella unidad, los integrantes del Registro se entrevistaron con las autoridades del penal, quienes le informaron que al día de la visita se alojaban 272 personas. Así también, los funcionarios dialogaron con los internos de los pabellones A, B, 4, 5, 8 y el sector de resguardo.

Según pudo observarse, todos los pabellones inspeccionados cuentan con similares problemas de infraestructura: condiciones edilicias muy deterioradas, instalación eléctrica precaria sin disyuntor y con cableado casero expuesto. Además, el desagüe cloacal está tapado causando por momentos que rebalse de materia fecal.

En los sectores 4, 5 y 8 los internos afirmaron no recibir la adecuada atención médica. Durante la visita a estos espacios se observaron pérdidas en los techos y paredes corroídas. Mientras en el pabellón “A” el techo de chapa no está completo, causando que los internos sufran directamente las inclemencias del clima.

Los funcionarios aprovecharon la oportunidad para continuar el diálogo iniciado en la anterior visita con el compañero de celda de Mariano Sebastián Delgado.

El 31 de enero Mariano Sebastián Delgado falleció electrocutado en la Unidad Penitenciaria Nº 3. El hecho, independientemente de la investigación que el Ministerio Público de la Acusación encomendó al Fiscal Walter Jurado, motivó la inmediata intervención del SPPDP y el seguimiento mediante inspecciones y entrevistas. 

Inspección a la Alcaidía Regional

Por su lado, la Defensoría Regional efectuó el día 7 de febrero una inspección en la nueva Alcaidía donde trasladaron a las mujeres alojadas en la vieja Unidad Penitenciaria Nº 5 y la Alcaidía de Mujeres.

Allí se constituyeron funcionarios de la Unidad de Ejecución Penal, junto al equipo de la Oficina de Asistencia al defendido Víctima de Violencia Institucional. La visita tuvo como objeto realizar un recorrido por las instalaciones, entrevistar a las internas y constatar el estado en el que se encuentran las mujeres privadas de su libertad.

El informe elaborado revela serias irregularidades y muestra que las condiciones de alojamiento de las internas no satisfacen los estándares mínimos exigidos a nivel internacional en materia de encierro, en particular por las Reglas Mandela.

Existen problemas comunes que afectan a la totalidad de los espacios visitados. En este sentido, las internas destacaron: la carencia de artefactos para mantener los alimentos y lavar la ropa; problemas de larga data por la falta de atención médica; falta de agua potable; mal funcionamiento de los sanitarios; escasez de mobiliario; falta de electricidad; falta de salida al patio; la ausencia total de comunicación con el exterior, ya que no poseen teléfonos públicos o celulares para contactarse con sus familiares y/o abogados; entre otros.

Esta situación se vio agravada en el módulo B del Pabellón 2, lugar donde conviven las internas con sus hijos menores de edad. Allí señalaron que han tenido problemas con los refuerzos alimentarios para sus hijos y para asistir en los turnos programados a los hospitales, siendo la mayoría por consultas pediátricas u obstétricas.

Con todo ello, el SPPDP realizó el viernes una presentación ante el Secretario de Asuntos Penitenciarios, Pablo Cococcioni, a los fines de informarle el resultado de la inspección efectuada y requirió al funcionario del Poder Ejecutivo la pronta solución de los problemas detectados.