Cada 10 de diciembre celebramos el Día Internacional de los Derechos Humanos. Esta jornada se remonta al año 1948 en que la Asamblea General de Naciones Unidas aprobó la Declaración Universal de Derechos Humanos. En ella, fueron proclamados los derechos inalienables que corresponden a toda persona como ser humano, basándose en un paradigma de universalidad sin ningún tipo de condiciones ni distinciones, fundamental para el sostenimiento y consolidación del Estado de Derecho.

Además, se trata de una fecha muy especial para nuestro País en razón de conmemorarse el Día de la Restauración de la Democracia. El 10 de diciembre de 1983, con la presidencia del Dr. Raúl Alfonsín, se puso fin a largos años de la dictadura cÍvico-militar que cercenó innumerables Derechos de la sociedad argentina. Nunca debemos dejar de recordar nuestra historia como Pueblo, de promover los valores de la democracia -continuos e inacabados-, ni de bregar por el efectivo disfrute de la libertad, la igualdad y de todos los Derechos que hacen a la plenitud de las personas como tales.

Por nuestra parte, el Servicio Público Provincial de Defensa Penal -SPPDP-  orienta uno de los ejes de acción a la detección, denuncia, litigio y registro de los hechos de violencia institucional -fueran policiales, penitenciarios, o de otras áreas del Estado-. Esa labor se halla documentada en los informes que emite el Registro Provincial de Violencia Institucional y demás afectaciones a los Derechos Humanos.

Asimismo, la Defensoría Provincial implementó el “Protocolo de Asistencia y/o Asesoramiento a Víctimas de Violencia Institucional y demás afectaciones de Derechos Humanos” destinado a garantizar el acceso a la justicia y evitar la revictimización de las personas más vulnerables, en consonancia con el cumplimiento de la misión institucional y los mandatos legales establecidos por la Constitución e Instrumentos Internacionales en materia de Derechos Humanos.