El día jueves 15 de junio, la Defensora Provincial, Dra. Jaquelina Ana Balangione, conjuntamente con los integrantes del equipo de la Subsecretaria del Registro de Torturas, Malos Tratos y demás afectaciones a los Derechos Humanos, Lic. Lorena Negro, Dr. Esteban Montenovi y Tco. Ariel Peralta, realizaron una inspección no anunciada a la Unidad Penitenciaria N° 11 ubicada en la localidad de Piñero con el objetivo de relevar el estado de situación general del establecimiento y las condiciones en que los internos se encuentran privados de su libertad.

La actividad implica el inmediato seguimiento de una reciente inspección coordinada por el Defensor Regional, Dr. Gustavo Franceschetti, y un nutrido grupo de defensores de esa circunscripción con el fin de evaluar no sólo las condiciones en un determinado momento, sino la continuidad y progresión de las mismas

En el marco de la visita las autoridades concretaron una reunión con los responsables del penal, para luego realizar un exhaustivo recorrido de todas las instalaciones. Allí, los integrantes del SPPDP ingresaron a los diferentes módulos, recorriendo sus pabellones y los sectores de resguardo de cada uno de ellos. También solicitaron información acerca de las actividades educativas, laborales, servicios de salud, alimentación, regímenes de visitas, comunicación con el exterior, con el objetivo de evaluar el acceso a sus derechos por parte de las personas alojadas.

El equipo se halla abocado al análisis de la información recabada a fin de elaborar un informe para el registro y realizar los reclamos que corresponden ante las autoridades competentes.

Cabe destacar que al día de la fecha se encuentran 1450 personas alojadas en dicha unidad, lo que la constituye la más grande de la provincia.

La recorrida de la Unidad Piñero es la séptima inspección que realiza personalmente la Defensora Provincial con el equipo.

Inspecciones de la Defensa Pública a centros de detención provinciales

Las inspecciones a los establecimientos de encierro de personas presentan, en lo inmediato, los siguientes objetivos específicos: investigar y evaluar el estado de las personas que se encuentran en situación de encierro y las condiciones generales de privación de la libertad, contemplando las condiciones de habitabilidad del edificio. Se evalúa el respeto de los derechos de las personas encerradas y, las medidas jurídico administrativas establecidas y aplicadas dentro del lugar inspeccionado, el régimen de actividades y contacto con el mundo exterior, el acceso a la atención médica, el trato del personal para con las personas encerradas y el trato entre las personas privadas de libertad.

El monitoreo de lugares de detención no sólo tiene una finalidad preventiva, sino que también aspira a generar, desde el SPPDP, respuestas inmediatas a los problemas que afectan a las personas encerradas al visibilizar los mismos. Por ello, se documentan con la mayor objetividad y detalle posible las condiciones de encierro que luego determinarán las políticas de abordaje.

Además, dichas inspecciones constituyen una valiosa herramienta para prevenir la tortura y los malos tratos de las personas sometidas a encierro, resultando un imperativo legal para el SPPDP.